Chopin.

24 junio 2016

Charles Aznavour Hier encore





Ayer aún tenía veinte años yo acariciaba el tiempo y jugaba con la vida como se juega al amor y vivía por la noche sin contar con mis días que huían en el tiempo, hice tantos proyectos que se quedaron en el aire, fundé tantas esperanzas que se esfumaron y yo quedé perdido sin saber a dónde ir, mis ojos buscaban el cielo pero mi corazón estaba enterrado...

Ayer aún tenía veinte años despilfarraba el tiempo creyendo en retenerlo y para retenerlo hasta lo adelantaba, no hacía más que correr y me sentía sofocado ignorando el pasado conjugaba sólo el futuro, procedían de mi todas las conversaciones y daba mi opinión pensando que era correcta para criticar el mundo con desenvoltura...

Ayer aún tenía veinte años, pero perdí mi tiempo haciendo muchas locuras que en el fondo no me dejaron nada verdaderamente valioso, algunas arrugas en la frente y el miedo al aburrimiento ya mis años murieron antes de haber existido todos mis amigos han partido y ya no volverán más, por mis faltas yo hice el vacío a mi alrededor y yo gasté mi vida y mis jóvenes años de lo mejor a lo peor y desprecié lo mejor, petrifique mis sonrisas y congele mis miedos, ellos son el presente, el presente de mis veinte años.

23 junio 2016

Si eres aire, te quiero...aún así, yo te quiero. Si eres lluvia, cálame. Descúbreme tu frialdad en el roce leve de tu tacto en mi piel…
 

Hazme olvidarte, si sólo eres aire, derrocha pericia y produce ira a tu alrededor, déjame sola, hazme llorar por ti, destroza mis esperanzas y rodéame de temores. Que me llegue la soledad y me llenen las dudas.

Conviértete en lo que no eres, para que deje de amarte como lo hago y demuestra pronto que eres aire.
Para poder olvidarte… si sólo eres aire.




Recuerdo todavía mis miedos antes de mi propio casamiento, de las preguntas acerca de la convivencia, del desgaste, de los problemas, de los hijos y del peso de esas palabras que hay que tomar como sagradas:
"Que el hombre no separe lo que Dios a unido".
Hoy cuando en el mundo quedan pocas cosas que realmente se hacen por amor, el que se apueste por el matrimonio es como decir: " yo me juego por esto, intangible, glorioso, sacrificado, lleno de
alegrías, para toda la vida" y eso no se puede hacer si no es con la conciencia plena de que hay que ponerlo TODO.
Alegra saber que juntos se decide a negarse cada uno para ser "nosotros" y empezar una vida rodeada de problemas que solo tienen sentido y son superados cuando está cerca el amor mutuo.
Tantas y tantas consideraciones sobre el amor, tanta inquietud del corazón. Y ahora con las manos unidas, con esas miradas juntas, y esas lágrimas puestas en común.
Por fin, ya está, casados, nuestras almas bailan una danza que participa de la divina gloria; no dejemos de bailar así durante toda la vida juntos, pendientes uno del otro, amantes ante Dios y ante los hombres.
Tu felicidad, mi felicidad: el gozo de abrazarse, de besarse los ojos y los sueños y hasta el más mínimo pensamiento.
Al momento del matrimonio se viven momentos de ensueño. Que nadie nos los toque, ni estorbe nuestra alegría. Debemos guardarlos bien dentro, en esa intimidad donde está lo que más queremos, donde se ponen a buen resguardo los detalles y las caricias. Juntos, en esa unidad de cuerpos y en esa efusión de almas.
¿Sabemos o nos damos cuenta de lo que significa el sí?
Es la entrega, el servicio, la ternura, el perdón siempre, la confianza, la aurora, la sinceridad más desnuda, la sonrisa, la mansedumbre, los regalos, la sorpresa constante de las mañanas, el llorar y el reír juntos, (por lo que hay que luchar día a día).
De corazón espero que la vida venga llena de problemas para superar juntos; (suena raro ah?, pero;) es el deseo de alguien que reconoce que en las pruebas está la vida misma, es en la adversidad donde la confianza en el otro manda y esa confianza hace cada vez más grande al matrimonio y por tanto a la familia.
¡Qué prodigio el del amor y cuanta su fuerza!

22 junio 2016






De vez en cuando y por una mañana o una tarde entera, debiéramos sumergirnos en baños de soledad y silencio. Disciplina excelente que fortalece el espíritu y ayudar a ir encontrándonos con nuestro ser más profundo y verdadero. No le temamos a la soledad. Aprendamos a amarla.

La soledad no existe en realidad para quien sabe poblarla con sus razonamientos y sus meditaciones. Fue el gran poeta español Luis Góngora, quien sabiamente dijo: "A mis soledades voy, de mis soledades vengo, porque para estar conmigo me basta mi pensamiento".

Tampoco le temamos al silencio. El silencio vitaliza nuestra mente y su sistema nervioso, y dota de solidez y fuerza expresiva a las palabras cuando salgamos de nuestras treguas de mutismo y tornemos a hablar. No es que la relación social sea mala, ni indeseable la comunicación hablada, pero a veces nos metemos y enredamos demasiado en el ajetreo y la palabrería del mundo. Tendamos al equilibrio interno y al reencuentro con nosotros mismos. Regalémonos de vez en cuando baños de soledad y silencio

Solamente en el silencio y en la soledad se encuentra la paz y la respuesta a todas nuestras preguntas... escuchemos el infinito y estaremos escuchando no solo nuestra propia voz, sino también la voz del Universo. La meditación es el acceso, es la puerta que nos comunica con el conocimiento interior. Muchas veces cuando pedimos algo, nos preguntamos ¿Por qué no se nos concede nada de lo que pedimos? la meditación es la forma que tenemos de escuchar su respuesta.

17 junio 2016

Hay una gran diferencia...

Cada día damos las gracias más de veinte veces. Las damos cara a cara, por teléfono, por correo electrónico, con mensajes, etc. Muchas veces lo hacemos de forma automática, sin casi darnos cuenta. La pregunta es: ¿cuántas de estas veces somos capaces de mostrar de verdad gratitud?
"Solo un exceso es recomendable en el mundo: el exceso de gratitud" (Jean de la Bruyère)
Hay una gran diferencia entre dar las gracias y mostrar nuestro agradecimiento. Dar las gracias es una respuesta espontánea, automática, un convencionalismo social que por educación y por cordialidad hacemos de “oficio”. Es una expresión que ante algo que han hecho por nosotros cierra el círculo, pero a menudo lo cierra en falso. Porque hecho el formulismo, podemos pensar que ya hemos agradecido lo que hayan hecho por nosotros y puede que esta impresión no sea cierta en absoluto.
Hay muchos "gracias" que saben a pura hipocresía, de esos que uno ya descubre con solo oírlos que no hay detrás de ellos ni la más mínima intención de gratitud. Y estos son los que deberíamos evitar a toda costa.
Mostrar nuestro agradecimiento va mucho más allá de pronunciar la palabra mágica "gracias": es mostrarle a la otra persona que realmente valoramos y apreciamos lo que ha hecho por nosotros o lo que nos ha dado. Y en esto los convencionalismos no ayudan. Con la sobreutilizada expresión "gracias" no tenemos bastante, porque su utilización automática (más de veinte veces al día) la ha vaciado de contenido. Es necesario encontrar nuevas formas de mostrar a las personas el sentimiento de agradecimiento auténtico.
"Mientras los ríos corran al mar y haya estrellas en el cielo, debe durar la memoria del beneficio recibido en la mente del hombre agradecido" (Virgilio)
Para mostrar al otro nuestra gratitud, los pequeños detalles son mucho más eficaces que las palabras, y mucho más indicados para transmitir nuestro sentimiento. El reto es: ¿cómo podemos hacer sentir al otro que le estamos agradecidos de verdad? ¿Cómo podemos mostrarle que ocupa un pequeño espacio en nuestro corazón y en nuestro pensamiento?
Es imprescindible pensar en gestos que, conectados con aquello que hemos recibido, lleguen al otro.
Recibir el agradecimiento por algo que hemos hecho es sin duda agradable, y es bueno que lo disfrutemos. Pero no debemos necesariamente contar con ello, y sobre todo no debemos depender de ello.
Si dependemos de los agradecimientos de los demás, nos exponemos a constantes frustraciones.
Hay gente que hace favores a los demás para que le den las gracias. Es su alimento emocional, lo que le llena y le da energía. Y, claro, cuando no lo reciben se indignan: ¿cómo puede ser que no me den las gracias?
Estos comportamientos son un claro signo de dependencia: aquellos que actúan así necesitan y dependen del agradecimiento de los demás, cosa que inevitablemente les acarreará problemas.
Deberíamos preguntarnos: ¿por qué hacemos un favor?, ¿porque así lo sentimos y está en nuestra forma de ser, o porque esperamos con ello obtener el reconocimiento de los otros?
Si lo hacemos por convicción, no debemos esperar la gratitud del otro. Si llega, la recibiremos con ilusión. Si no la hay, nos reconfortará la sensación de que hemos hecho exactamente lo que queríamos hacer, porque no esperábamos nada por ello.
Cada mensaje de gratitud es, si está bien expresado, no solo necesario, sino extremadamente valioso para mantener las relaciones.
¿Cuántos agradecimientos Hemos dejado en el camino?
"Cuando bebas agua, recuerda la fuente" (proverbio chino)
Muchos de nosotros raramente dejamos de dar las gracias, pero muy frecuentemente nos saltamos el agradecimiento. Busquemos a nuestro alrededor a quien ha hecho recientemente algo por nosotros que ha sido importante. Y busquemos una forma creativa de mostrarle nuestro agradecimiento. Hagámoslo por ellos, pero también por nosotros. Porque agradecer es a menudo tan gratificante como recibir.
Con estos gestos, vayamos saldando la deuda de tantos años en los que nos hemos limitado a dar tantos y tan educados ¡gracias!


03 junio 2016

La vida.




La vida es un don para:

Recibir. No nos damos la vida solos. Ni la conquistamos, ni la merecemos, ni la compramos: fundamentalmente la recibimos

Cuidar. La vida, don valioso, es sin embargo un don frágil, para cuidar, y que pasa por etapas en las que se ve amenazada. Necesita del cuidado amoroso y en conjunto, del padre, de la madre y de la protección necesaria en atención a su vulnerabilidad y pequeñez.

Entregar. Al mismo tiempo, la vida es un don para entregar, “No hay amor más grande que dar la vida por los amigos. Ustedes son mis amigos…”.

Compartir. Así es: La vida se acrecienta y se disfruta dándola, compartiéndola y se debilita en el aislamiento. La vida alcanza su pleno sentido cuando se desarrolla en comunión.

Administrar. Por lo que es indispensable la formación de los niños y jóvenes, varones y mujeres, para la vida familiar estable y el ejercicio de una paternidad y maternidad responsable y generosa. El crecimiento y desarrollo personal, debe incluir el conocimiento de la sexualidad y de la fertilidad para integrar en la afectividad y el amor.

Contemplar. La vida es, antes y después, de todo lo expuesto, un don para contemplar. Esto lo presentimos cuando va pasando el tiempo y la función del recuerdo se desarrolla de un modo muy vívido. Nosotros, los mayores contemplamos nuestra propia historia desde una perspectiva diferente. Esta actitud contemplativa nos induce también a la admiración hacia el milagro de la vida y a honrarla allí donde se manifieste, con especial atención a las situaciones de amenaza o fragilidad


02 junio 2016

"DIOS" CHARLES AZNAVOUR




DIOS

Dios sólo soy un hombre,
Dios de mi ten piedad,
y si es tu voluntad
resignado y fiel
mi cruz cargaré.

Dios, si tu me dejases
quien te reemplazará
no busques junto a mi,
que nadie, nadie me amparará.

Dios víctima me tienes
y no me quejaré
Tú que todo lo das
si me lo quitas
Tú derecho es

Dios tienes presa mi alma
desnudo déjame
mi corazón irá a las llamas
no lo preciso más.
Mi Dios.

Los de arriba del muro

Sin lugar a dudas, “La Divina Comedia”, de Dante Alighieri, es una obra literaria que debe ser releída una y otra vez a lo largo de nuest...