Chopin.

24 octubre 2014




Se rompen las horas, segmentadas en minutos, mis noches son solo sueños, y me siento feliz a pesar del llanto.
 

Beso la almohada, donde durmió tu risa, bajo cortinas, apago locuras que tus labios dejaron encendidas.
 

La tiranía de mi piel se hace belleza y me siento sirena, cuando tus ojos me desnudan sin piedad.
 

Te sabes dueño de mi boca, que te busca, te besa… y que se hizo adicta al sabor de tus besos.

Los de arriba del muro

Sin lugar a dudas, “La Divina Comedia”, de Dante Alighieri, es una obra literaria que debe ser releída una y otra vez a lo largo de nuest...