Chopin.

25 julio 2014






En este hermoso paraje, y en medio de este silencio, te he imaginado temblando entre mis brazos, con los ojos entornados y tus labios húmedos, anhelantes… más que pedir, me obligas a quererte, así...sin palabras porque amor no se pide... y yo te amo, como nadie antes te ha amado.
Con galopar suave primero, luego violento, desciendes por mis llanuras, tiemblas entre mis besos, entre mi te vuelves vulnerable, como solo el deseo puede hacerte vulnerable...entregado... y abandonado a mi cuerpo, como pájaro en mis manos, sin que nadie pueda ya separarnos…y mis brazos alrededor de tu espalda, forman corona de impudor, en esta hermosa noche de luna y silencio.

Los de arriba del muro

Sin lugar a dudas, “La Divina Comedia”, de Dante Alighieri, es una obra literaria que debe ser releída una y otra vez a lo largo de nuest...